Cudillero:
Cudillero, es uno de los más afamadas, admiradas y fotografiadas de las villas marineras del norte de España, y claro exponente del origen marinero y de la tradición pesquera de este pueblo recóndito, como escondido en un abrigo natural, conocido también como Villa Pixueta, en alusión al argot socio-lingüístico único que desde siempre ha servido para comunicarse a esta singular comunidad.
Un paseo por la villa es imprescindible: monumentos, casas de pescadores donde cuelgan los típicos ‘curadillos’ – peces, normalmente pequeños escualos, deshidratados al aire (forma primitiva de conservación), que constituyen un manjar único y muy típico -, tiendas, el faro, el puerto, un aperitivo o comida marinera…
Y como complemento un paseo por el concejo nos lleva a paraísos únicos como la Playa del Silencio, la de Gueirúa, la Concha de Artedo, la de San Pedro de la Ribera, y a las inigualables vistas panorámicas del Cabo Vidío, uno de los grandes promontorios y acantilados de la costa asturiana.
Aunque no sólo las playas tienen encanto en Cudillero; una visita al Valle de Faedo, o en plan más cultural al Palacio de los Selgas en el Pitonos da idea de la riqueza natural y cultural de este concejo.